jueves, 18 de marzo de 2021

GUÍA DE ORIENTACIÓN AL APRENDIZAJE - FILOSOFÍA - CICLO 5

 FILOSOFÍA CICLO 5

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ORIENTACIONES DE LAS ACCIONES A DESARROLLAR


A continuación, se presentan los aspectos generales para el desarrollo de las competencias básicas de aprendizaje en los estudiantes de grado décimo. Esta Guía tiene su desarrollo en 5 pasos:
Exploración, Estructuración, Práctica, Transferencia y Valoración, en cada una se adelantarán actividades que contribuyan al cumplimiento del objetivo de aprendizaje. De manera atenta solicito que presenten sus trabajos requeridos con orden, letra legible, desarrollo de la guía en cuaderno o Word, que si no es posible convertir el archivo (fotos o documento word) a PDF, tomen las imágenes de sus trabajos de forma horizontal y con la mejor resolución posible; este trabajo puede ser enviado a los correos señalados anteriormente y a quien corresponda.

EXPLORACIÓN ¿Qué voy a aprender?

PREGUNTAS GENERADORAS
 ¿Cómo se estableció el sistema económico y político en el mundo?
 ¿Existe alguna voluntad o intención detrás del orden establecido económico y político?
 ¿Cómo podemos solucionar los problemas sociales de hoy?
 ¿Qué acciones o modelo económico, político y social contribuiría a disminuir las
desigualdades sociales?

SITUACIÓN DE APRENDIZAJE
1. Describa tres cambios importantes y significativos que hayan impactado la sociedad

ESTRUCTURACIÓN Lo que estoy aprendiendo
En este espacio se encuentra toda la información relevante para garantizar que las competencias básicas se desarrollen, por lo tanto, se describen a continuación:

LA ECONOMÍA POLÍTICA
La Economía política marxista-leninista es parte de la ciencia íntegra del marxismo-leninismo. El marxismo-leninismo es la ciencia de las leyes que rigen el desarrollo de la sociedad, la ciencia de la revolución socialista y la dictadura del proletariado, la ciencia de la construcción de la sociedad socialista y comunista. El marxismo-leninismo es una doctrina íntegra y armoniosa que comprende tres partes: la Filosofía, la Economía política y la teoría del Comunismo Científico. 

La Economía política es una parte importante del marxismo-leninismo, ya que trata de la base de la vida de la sociedad humana. La producción de bienes materiales es la base de la vida de la sociedad Hace ya mucho tiempo que surgió el problema de móvil que hace progresar a la sociedad humana. A este respecto se han expuesto distintos criterios. Por ejemplo, los representantes de la religión vienen afirmando que el desarrollo se produce obedeciendo a la voluntad divina. Sin embargo, la ciencia y la práctica han demostrado que no existen fuerzas sobrenaturales. También se ha difundido la opinión, compartida hoy todavía por muchos hombres de ciencia burguesa, de que el desarrollo de la sociedad depende en grado decisivo del medio geográfico, es decir, de determinadas condiciones naturales (clima, suelo, minerales, etc.). Claro que el medio geográfico es una de las condiciones indispensables para el desarrollo de la sociedad, pero no la determinante. 

A lo largo de tres mil años, por ejemplo, se han sucedido en Europa tres regímenes sociales distintos, y en Europa Central y Oriental, incluso cuatro. Mientras tanto, durante el mismo período, las condiciones geográficas de Europa no experimentaron cambio alguno, y si se produjo fue tan insignificante que la geografía apenas lo registra. Hay quien considera que la marcha de la historia depende de la voluntad de personalidades eminentes: hombres de Estado, jefes militares, etc. En realidad, las personalidades eminentes aceleran o retardan el advenimiento de uno u otro acontecimiento, pero no pueden cambiar el curso de la Historia.
¿Cuáles son, pues, las fuerzas determinantes del desarrollo de la sociedad? Marx fue el primero en responder a esta pregunta. Para vivir, los hombres necesitan alimentos, vestido, calzado, vivienda y otros bienes materiales. Y para poseer estos bienes, tienen que producirlos, tienen que trabajar. Cualquier sociedad está condenada a desaparecer si deja de producir bienes materiales. Por eso, la producción de los bienes materiales es, como enseña Marx, la base de la vida y del desarrollo de cualquier sociedad.

¿Qué se debe entender, pues, por producción de bienes materiales? En el proceso de producción de los bienes materiales concurren el trabajo del hombre, los medios de trabajo y el objeto que ha de ser elaborado. El trabajo es la actividad racional del hombre encaminada a la producción de bienes materiales. En el proceso del trabajo, el hombre ejerce su influjo sobre la naturaleza para adaptar los objetos de ésta a sus necesidades. El trabajo es patrimonio exclusivo del hombre, una eterna necesidad natural y la primera condición de toda la vida humana. Según expresión de Engels, el trabajo ha creado al propio hombre.

El proceso de la producción es inconcebible sin los medios de trabajo. Medios de trabajo son todas las cosas de que se sirve el hombre para actuar sobre los objetos que han de ser elaborados. Figuran entre ellos las máquinas, el utillaje, instrumentos, instalaciones, edificios destinados a la producción, todos los tipos de transporte, los canales, las líneas de conducción de energía eléctrica, etc. La tierra es también un medio universal de trabajo. De todos estos medios de trabajo, corresponde el papel decisivo a los instrumentos de producción. De los instrumentos de trabajo de que se vale el hombre depende precisamente su poder sobre la naturaleza. Marx señala que las épocas económicas se distinguen unas de otras no por lo que se produce, sino por los instrumentos que se emplean en la producción de bienes materiales.

Los hombres se valen de los instrumentos de producción para actuar sobre los objetos del trabajo, es decir, aquello sobre lo que recae el trabajo del hombre. Y como el trabajo del hombre recae sobre la naturaleza circundante, la propia naturaleza (la tierra y el subsuelo, las aguas) es objeto universal del trabajo. Todos los objetos primarios del trabajo se encuentran en la naturaleza. El hombre debe adaptarlos para satisfacer sus necesidades.

Los medios y los objetos del trabajo forman, en conjunto, los medios de producción. De por sí, los medios de producción, como es lógico, no pueden crear bienes materiales. La maquinaria más perfecta es ineficaz si no interviene el hombre. De ahí que el factor decisivo de toda producción sea el hombre, su fuerza de trabajo.

Las fuerzas productivas y las relaciones de producción
En cualquier fase de desarrollo que se hallara, la producción siempre ha tenido dos aspectos: las fuerzas productivas y las relaciones de producción. Las fuerzas productivas son los medios de producción y, ante todo, los instrumentos de trabajo creador por la sociedad, así como los hombres que producen bienes materiales. Precisamente los hombres, gracias a su experiencia y hábitos de trabajo, son los que accionan los instrumentos de producción, los perfeccionan, inventan máquinas y amplían sus propios conocimientos científicos. Con ello se asegura el desarrollo continuo de las fuerzas productivas y se despliega la producción de bienes materiales en medida creciente. Sin embargo, los hombres no producen los bienes materiales trabajando aisladamente, sino en común, en grupos o en sociedades.

Tomemos, a título de ejemplo, una fábrica de calzado de nuestros días.
¿Cuántos hombres trabajan en ella para producir una clase de mercancía: el calzado? Centenares e incluso millares, todavía trabajan más personas para esta empresa en la fabricación de máquinas, el curtido de pieles, la producción de hilos, agujas, etc. Por consiguiente, en el proceso de la producción de bienes materiales, los hombres se hallan vinculados entre sí, dependen los unos de los otros y contraen determinadas relaciones. Marx dio el nombre de relaciones de producción o económicas a las que surgen entre los hombres en el proceso de la producción, el cambio y la distribución de los bienes materiales.

Las relaciones de producción pueden ser relaciones de cooperación y ayuda mutua de hombres libres de la explotación o bien relaciones de explotación del hombre por el hombre. Esto depende de quién es el propietario de los medios de producción: la tierra y el subsuelo, los bosques, las fábricas, los instrumentos de trabajo, etc. Cuando los medios de producción son propiedad privada y no pertenecen a toda la sociedad, sino a determinadas personas, grupos o clases sociales, se establecen relaciones de explotación del hombre por el hombre, relaciones de dominación y subordinación.

Bajo el capitalismo, los obreros carecen de medios de producción y por eso, precisamente, se ven forzados a trabajar para los capitalistas. En el socialismo, los medios de producción pertenecen a toda la sociedad. De ahí que en él no haya explotación del hombre por el hombre y las relaciones entre las personas sean de cooperación amistosa y ayuda mutua socialista. Las relaciones entre los hombres y los medios de producción determinan la situación y el lugar que ocupan los hombres en la producción y los medios de distribución de los productos del trabajo. Por ejemplo, en el capitalismo, la burguesía, que es la propietaria de los medios de producción, dispone de todos los productos del trabajo de los obreros, mientras la mayoría de estos últimos vive sumida en la miseria.

En el socialismo, en el que los medios de producción pertenecen al pueblo (son propiedad social), la distribución de los artículos de consumo se efectúa según el trabajo y se asegura la elevación constante del nivel de vida material y cultural de todos los trabajadores. Este es el contenido de las relaciones de producción (económicas) entre los hombres.

La historia del desarrollo de la sociedad humana conoce cinco tipos fundamentales de relaciones de producción: el de la comunidad primitiva, el esclavista, el feudal, el capitalista y el socialista, correspondiente a la primera fase del comunismo. Cada uno de ellos tiene por base una forma determinada de propiedad de los instrumentos y medios de producción. Así, la b ase de las relaciones de producción de los regímenes esclavista, feudal y capitalista es la propiedad privada de los medios de producción que siempre ha originado y origina inevitablemente la división de la sociedad en clases hostiles, en explotadores y explotados.

Por eso, el rasgo fundamental de la esclavitud, el feudalismo y el capitalismo es la encarnizada lucha de clases. Únicamente no hay lucha de clases en el socialismo, en el que la base de las relaciones de producción es la propiedad social, socialista, sobre los medios de producción; la sociedad consta de clases amigas: obreros, campesinos y la capa social formada por los intelectuales.

Las fuerzas productivas sumadas a las relaciones de producción forman conjuntamente el modo de producción. Las fuerzas productivas constituyen el elemento más dinámico del modo de producción, se modifica continuamente debido a que los hombres perfeccionan sin cesar los instrumentos de trabajo y acumulan experiencia productiva. Por lo que respecta a las relaciones de producción, cambian según va cambiando el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas y ejercen, a su vez, su influjo sobre el desarrollo de éstas. Cuando las relaciones de producción corresponden al nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, éstas progresan con todo éxito. Los países socialistas, donde la producción se desarrolla intensamente, sin crisis ni paro forzoso, porque se basa en la propiedad social sobre los medios de producción, ofrecen un ejemplo de correspondencia de las relaciones de producción con el nivel de las fuerzas productivas.

Cuando las relaciones de producción no corresponden al nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, constituyen un freno para el desarrollo de la producción. Los países capitalistas ofrecen un ejemplo de falta de correspondencia de las relaciones de producción con el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas. En ellos la producción progresa lentamente, durante las crisis económicas llega incluso a retroceder, y muchos millones de trabajadores pierden el empleo y van a engrosar las filas de los parados. Esto se debe a que en la sociedad burguesa domina la propiedad privada capitalista sobre los medios de producción, lo que constituye un impedimento para el progreso de las fuerzas productivas.

Cada nivel determinado de desarrollo de las fuerzas productivas requiere las correspondientes relaciones de producción. En ello consiste la ley económica de la correspondencia de las relaciones de producción con las fuerzas productivas, descubierta por Marx. Dicha ley pone al desnudo la base económica de las revoluciones sociales. Cuando las relaciones de producción se retrasan respecto al desarrollo de las fuerzas productivas y frenan su progreso, forzosamente tienen que ceder su lugar a otras nuevas.

En la sociedad dividida en clases hostiles el cambio de las relaciones de producción se opera siempre mediante la revolución social. Sólo en la sociedad socialista, donde no existen clases hostiles, el desarrollo de las relaciones de producción no se realiza a base de revoluciones sociales, sino mediante su modificación armónica según van progresando las fuerzas productivas. Del modo de producción en conjunto debe distinguirse la base de la sociedad. Se entiende por base el conjunto de las relaciones de producción dominantes en la sociedad de que se trate, vinculadas a un determinado nivel de las fuerzas productivas.

La base de la sociedad puede ser antagónica y no antagónica. Las bases de las sociedades esclavista, feudal y capitalista son antagónicas, ya que sus cimientos son la propiedad privada sobre los medios de producción y las relaciones de dominación y subordinación, de explotación del hombre por el hombre. La base de la sociedad socialista no es antagónica, ya que su cimiento es la propiedad social sobre los medios de producción y queda excluida toda clase de explotación. La base engendra la correspondiente superestructura y determina su desarrollo. Se entienden por superestructura los conceptos políticos, filosóficos, jurídicos, artísticos, religiosos, etc., de la sociedad y los institutos que les corresponden.

En la sociedad dividida en clases, la superestructura tiene un carácter clasista. La clase dominante crea a tenor con sus conceptos, los institutos llamados a defender sus intereses clasistas. Tanto la base como la superestructura sólo existen durante un período determinado. Al cambiar la base cambia también la superestructura. Así, el cambio de la base feudal y su sustitución por la capitalista tuvo como consecuencia la sustitución de la de la superestructura feudal por la capitalista; la aparición de la base socialista hizo aparecer la superestructura socialista y destruyó la capitalista. Si bien la superestructura es, en conjunto, engendrada por la base, algunos elementos de la nueva superestructura pueden surgir en las entrañas de la vieja sociedad, ya que en ella aparecen ideas y conceptos inherentes a la clase de vanguardia. Por ejemplo, en la sociedad capitalista surge la ideología proletaria, correspondiente a la nueva clase revolucionaria, el proletariado.

El modo de producción de los bienes materiales, como unidad de las fuerzas productivas y las relaciones de producción, conjuntamente con la superestructura correspondiente, constituyen la formación económico-social. La historia conoce cinco formaciones económico-sociales: la de la comunidad primitiva, la esclavista, la feudal, la capitalista y la comunista, cuya primera fase es el socialismo. A cada una de ellas corresponde su propia economía, sus conceptos, ideas e institutos. El desarrollo de las formaciones económico-sociales comienza por la inferior y progresa hacia la superior. Así, el feudalismo cedió su lugar al capitalismo, y éste, el socialismo, fase inferior del comunismo. La raíz del surgimiento, desarrollo y destrucción de las formaciones económico sociales se halla en las leyes del desarrollo de la sociedad.

Las leyes económicas del desarrollo de la sociedad El marxismo-leninismo enseña que no se debe concebir la naturaleza y la sociedad como una aglomeración fortuita de fenómenos aislados, exentos de relaciones mutuas. Al contrario, todos los fenómenos de la naturaleza y la sociedad guardan relación entre sí y se condicionan mutuamente.

Esa profunda relación entre los fenómenos se expresa en las leyes del desarrollo de la naturaleza y la sociedad. La misión de la ciencia es descubrir dichas leyes. El desarrollo de la sociedad tiene por base las leyes económicas que expresan toda la diversidad de las relaciones sociales de producción, distribución, cambio y consumo. Para la Economía política, como ciencia, tiene mucha importancia el descubrimiento de las leyes económicas que rigen el desarrollo de la sociedad. Las leyes de la naturaleza y la sociedad poseen un rasgo común: su carácter objetivo, es decir, surgen y actúan independientemente de que las conozcamos o no, de que sea deseable o no una u otra ley. Ello quiere decir que los hombres no pueden crear nuevas leyes. Lo único que pueden hacer es descubrirlas. Ahora bien, el que las leyes sean objetivas no quiere decir que los hombres se vean impotentes ante ellas. Pueden conocerlas y aprovecharlas en beneficio de la sociedad.

Así, al conocer la ley de la correspondencia de las relaciones de producción con las fuerzas productivas, el proletariado de los países socialistas, dirigidos por los partidos comunistas y obreros y en alianza con el campesinado, derrocó en su tiempo el Poder de los explotadores y procedió a la construcción de la nueva sociedad.

PRÁCTICA Practico lo que aprendí
Es tiempo de hacer una pausa para asimilar la información de cada temática, así que para
relacionar los contenidos con la vida diaria te invito a:
1. Elabore un cuadro comparativo de los modos de producción
2. Realice un acróstico de 10 palabras

TRANSFERENCIA ¿Cómo sé que aprendí?
Responde las siguientes preguntas en consideración a la lectura previa
1. ¿Qué estudia la economía política?
2. ¿Qué son bienes materiales?
3. ¿Qué son las fuerzas productivas?
4. ¿Qué es el Trabajo?
5. ¿Qué son los medios de producción? Describa
6. ¿Qué son las relaciones de producción? Describa
7. ¿Cuáles son los tipos fundamentales de producción? Describa cada uno
8. ¿Qué son los modos de producción?
9. ¿Qué es la base de la sociedad y la superestructura según Carlos Marx?
10. ¿Qué es y qué enseña el Marxismo-Leninismo?
11. Realice un mapa conceptual de lo leído
12. Resalte las ideas que considera más importantes en el texto e identifique las palabras que para usted son desconocidas y búsqueles el significado
13. Elabore 5 preguntas con sus respectivas respuestas al texto que le permita afianzar su aprendizaje

VALORACIÓN ¿Qué aprendí?
En el desarrollo de la guía de trabajo por favor responda que aprendizajes obtuvo:
¿Qué se logró?, ¿Qué dificultades tuvimos? ¿Qué podríamos mejorar? ¿Qué fue lo que más te causo dificultas al resolver las tareas de la guía? ¿Por qué crees que te causó dificultad? ¿Qué fue lo que te pareció más fácil en la guía? Con tus palabras escribe qué aprendiste. ¿Cómo autoevalúas tu desempeño académico hasta el momento hasta el momento?

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